El futuro edificio de Manises costará más de 37 millones de euros y está previsto que las obras terminen a principios de 2012

Aunque Valencia sea la tercera capital de España, su aeropuerto no está a la altura de la importancia de la ciudad. Pese a que en número de habitantes sólo nos supera Madrid y Barcelona, la realidad es que la infraestructura no se corresponde, ni en cifras ni en superficie, con la importancia estratégica de la Comunitat Valenciana. Y mucho menos tras perder, el último año, un millón de viajeros.

Ahora, sin embargo, y tras una tímida recuperación del número de pasajeros, Fomento ha retomado el proyecto de ampliación del aeropuerto, donde se va a gastar 79,6 millones de euros, y cuyas obras están a punto de iniciarse. El trabajo más importante, sin duda, es la construcción de una nueva terminal, que permitirá prácticamente duplicar el espacio disponible para los viajeros hasta alcanzar los 64.000 metros cuadrados.

Francisco Benítez es el arquitecto de la obra, encargado en su día de la construcción de la terminal regional. «Hemos hecho un edificio continuista, que se unirá a la actual terminal para crear un espacio diáfano. El proyecto contempla también unificar una zona comercial», aseguró Benítez en declaraciones a LAS PROVINCIAS.

La creación de un área donde se puedan ubicar todos los locales comerciales tiene como objetivo rentabilizar al máximo la nueva infraestructura. La disminución en el número de viajeros también afectó este año pasado a los pocos locales abiertos en la vieja terminal. Han cerrado tiendas de regalos que abrieron en el año 2007, cuando el aeropuerto registraba cifras muy buenas.

Y el objetivo de este nuevo proyecto es que sean comercios más atractivos para los usuarios de la terminal, no sólo para aquellos que van a coger un avión, sino también para los acompañantes. En el viejo edificio, sólo los locales de restauración, además de un kiosco, parecen tener un futuro claro. Según fuentes del aeropuerto de Manises, aquellos que estén interesados en abrir un local comercial podrán contactar con AENA para formalizar las condiciones de alquiler. «Tendrán que ser los interesados quienes decidan qué tipo de negocios quieren abrir en el aeropuerto».

La idea de Francisco Benítez pasará además por remodelar la actual terminal para que haya una unidad y crear un espacio diáfano. Y la cerámica valenciana estará presente en su decoración. «Quería hacer un homenaje a vuestra producción cerámica, para que el viajero pueda admirarlo nada más aterrizar en Valencia». Estéticamente, la Terminal 2 será continuación del edificio para aviación regional y se construirá con los mismos materiales. No en vano el arquitecto, especializado en aeropuertos, firmó también el diseño de la terminal regional.

El nuevo edificio costará más de 37 millones de euros y la Unión Temporal de Empresas Acciona-Ocide Construcción tiene 22 meses para finalizar la obra. Si los plazos se cumplen, para inicios de 2012 la terminal podría estar concluida. En la T2, como probablemente se denomine tras su inauguración, habrá un vestíbulo de casi 2.000 metros cuadrados, además de una zona central de facturación con veinte mostradores. La sala de embarque tendrá zonas de espera y restauración y se ampliará la actual zona de recogida de equipajes de la T1.

Las Provincias 14.04.10